A MI ESPOSA Y MADRE



Cuán bella eres tú, amada mía
Más bella que las rosas de mi jardín
Las cuales yo cultivo cada día
Con esmero y cariño para ti

Tierna madre con mis hijos eres tú
Romántica y cariñosa  para mí
Tú sabes que te amo con ternura
Como a  nadie en mi vida yo amé
Más lo digo y lo repito a tu oído
Que tu amor a mi vida le hace bien.

Mi admiración por ti crece día a día
Como crecen nuestros hijos con tu amor
El cual sirves a la mesa con alegría
Sin mostrarnos tu cansancio ni dolor

Hoy en tu día yo quiero reconocer
Que para mí, tú eres  bendición
Que Dios en su sabio parecer
A mi vida con tu vida me salvó

No hay esposa como tú en este mundo
Ni madre como tú, bella mujer
Que  sacie y consuele a mi vida
A pesar del cansancio del quehacer

Como pétalos de rosa son tus manos
Para alzar y acariciar a los bebés
Mas la fuerza que el Señor a ti ha dado
Edifica y fortalece nuestro ser.

Es mi esposa mi eterna compañera
Con la cual larga vida viviré
Para amarla y respetarla cada día
En las buenas y en las malas yo estaré

Como esposa, como amante, como amiga
Como madre, como abuela  en la vejez
A tu lado quiero estar amada mía
Con los hijos y los nietos otra vez.